Crisis del Sistema, Guerra Económica y Corrupción. ¡Venezuela resiste!

 La conflagración económica,  el aprieto de un sistema que va en descenso, más corrupción azotan a Venezuela.

Por: Neptalí Colina

   La economía Venezolana lleva tiempo enfrentándose a nuevas formas de guerra, desde la mediática hasta la guerra económica, esa que hoy en la coyuntura nacional ha causado estragos e infinidades de irregularidades sociales. Sin embargo, muchos son los que conjeturan que la economía de hoy, es el resultado de una crisis del modelo socialista. El panorama presume que aquí hay más que una crisis económica, son tan organizadas las acciones en contra de Venezuela y el modelo del socialismo que hasta el mismo Presidente de Venezuela Nicolás Maduro, indicó en Cadena Nacional “ que la guerra económica es el enemigo a vencer”.  Expresión que nos lleva a juzgar y pensar en quién está detrás de toda la guerra. A lo que el mismo atribuyó “que se trata de un mecanismo que se instaló desde el exterior para por ejemplo atacar la moneda”. Es aquí donde hay que ser minucioso y consciente para poder comprender el origen de la realidad que hoy azota a los venezolanos.

   Con precisión, confesó Miguel Ángel Ferrer “no hay, consecuentemente, lugar para el engaño. Las actuales dificultades económicas que afrontan ahora Venezuela y su magnificación mediática son resultados netos de esa guerra económica y propagandística, y no de fallas en el sistema económico, por más que éstas existan, como en cualquier país.” Es una visión que demuestra en principio que sí, es verdad hay muchas irregularidades, como todos los países pero eso no descarta que no hayan manos foráneas moviendo la internas a su merced para proporcionar más y más problemas, llegando así a sus más ambiciosos deseos. Es parte de las acciones que han contribuido a dar origen a más problemas.

   Por otra parte, Ferrer advierte  que “esos dos tipos de guerra de las que es testigo el planeta, tienen como objetivo último producir el hartazgo ciudadano y lograr en las urnas el anhelado derrocamiento del gobierno bolivariano. La apuesta tiene sentido. Ya veremos si la pueden ganar, lo que tampoco es fácil. Pero, por lo pronto, conviene no dejarse engañar sobre las razones y el origen de los actuales problemas económicos de Venezuela.” Como vemos es frecuente que existan estos tipos de guerra, pero lo que más sorprende es que sean tantos intentos desestabilizadores y atropelladores de  la economía venezolana, guerras que se roban en primer plano la tranquilidad de los ciudadanos.

    También el Ministro del Poder Popular para Finanzas y Banca Pública, Rodolfo Medina del Río manifestó que ante acciones desestabilizadoras debe haber un plan, por lo que en la actualidad ya posee en Plan de la Patria “es por ello que se llevan a cabo las discusiones con el pueblo para saber las necesidades que existen y de esta manera darle direccionalidad al plan”.

    Los últimos 3 años Venezuela ha estado frente a una guerra económica y mediática, desde los constantes ataques al aparato productivo y económico, como el papel de los medios de comunicación que han hecho de algunas irregularidades que atraviesa el país, como cualquier otro, un tema viral, buscando que los venezolanos se llene más  de odio, desilusión y pierda la confianza en su país.

    Igualmente, es necesario que se tenga presente muchos aspectos de nuestra economía, por ejemplo: somos un país que no produce o no lo suficiente para poder autoabastecerse, nuestra economía depende del oro negro,  importamos la mayoría de las cosas que necesitamos. Todas estas situaciones no han cambiado, a pesar de las grandes las promesas del fallecido presidente Hugo Rafael Chávez Frías, quien se propuso  convertir a Venezuela en potencia agrícola, confesión reiterada desde el año 1999, el contexto actual se  hace palpable e indiscutiblemente opuesta.

  ¿Por qué no se ha podido producir de forma eficiente?

  Esta es la consulta unánime que se corea la mayoría de los economistas, productores y demás venezolanos  que hoy piensan en invertir en el país. Es que muchos han sido los esfuerzos del gobierno de concretar esta gran tarea, de hecho el  gobierno venezolano ha sido el que más ha invertido en el campo, opinó Fernando Deibis, pero su inversión “ha caído en saco roto”, concluye el vocero de los productores agropecuarios del estado Lara. Es aquí donde   quiero llegar, es cierto que estamos ante una constante guerra económica, pero también son muchas las personas, políticos y “rojo rojitos” que han sabido beneficiarse y exprimir todo a su paso. Situación que ha mermado  en un colapso de la economía. Es como tener un saco de naranjas, donde se saca muchas al día para el jugo, ya luego de una semana si no se abastece o produce más se acabará. Pues así pasa con la economía de nuestro país.

 Crisis agroalimentaria

  En Venezuela los últimos seis años la producción de maíz, sorgo y arroz se redujo llegando de manera alarmante a estar  debajo de los cuadros estadísticos, incluso los datos informados por el Ministerio de Agricultura y Tierras (MAT), aunque la caída es mucho más difícil de acuerdo con las cifras de la Confederación Nacional de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro). Por tal razón, saber que si es cierto que la producción venezolana ha decaído mucho, quizás en la actualidad se incrementó, pero también no hay que ignorar muchos los factores que hoy están relacionados a este problema, que cada vez se hace más notorio, no hay producción y los pocos productores que hoy se encuentran en Venezuela están desmotivados, cansados de hacer tantas imprevisiones para poder llevar a cabo una siembra. 

Carlos Eduardo Albornoz, productor agropecuario y actual vocero agrícola del país va al campo y verá un peladero”. Esto es una realidad, pero no por eso hay que descartar que el gobierno no ha hecho maniobras para ayudar a este sector, sí lo ha intentado muchas veces, pero las respuestas o resultados finales han sido negativos en su mayoría, muchos de los que se hacen llamar “rojos rojitos” hoy no son más que oportunista que se benefician del dinero del pueblo.

 Por otro lado,  ya hace  más de 10 años, el ganado bovino nacional casi alcanzaba las 13 millones de cabezas, no obstante, para el año 2012, éste no supera los 12 millones de animales, informó la Federación Nacional de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga). Situación que nos sitúa en otro factor que ha desencadenado muchos problemas, empezando por uno donde la lógica nos diría que es al menos el más importante, la caída del ganado bovino y su falta de incrementación hacen que hoy se eleven los precios de la carne y la leche, es un factor en la economía que refleja la elasticidad  el precio de la demanda.

  La mayoría de los  productores agropecuarios especifican sus condiciones como “vergonzoso”, “insegura”, “desesperanzadora”, “desmotivados”. Si bien es cierto,  antes Venezuela tenía buena producción de azúcar, sorgo, maíz, arroz, realidad que la estaba posicionando muy cerca de conseguir su autoabastecimiento en relación a la producción de carne, hoy importa 70% de los alimentos que consume la nación. Antonio Faneite,  productor  del municipio Urdaneta explica claramente, angustiado, la dificultad de su situación, indicó  lo siguiente “estamos vendiendo el producto por debajo del costo. Para ganarle a la leche deberíamos venderla a Bs. 5 ó 6 el litro, pero nos la compran a Bs. 4. No sabemos qué hacer”. Es un contexto que cada día va desmejorando, mientras no se tomen medidas para priorizar y acabar esta realidad no se solventará, tampoco mientras existan tantos políticos corruptos que no han producido nada, solo han llenado su bolsillo sin importar el país y sus interés.

¿Y por qué la carestía de tantos  productos? (principalmente de alimentos y farmacéuticos)

  Muchos son los productos de la cesta básica que hoy escasean, que ya desde unos años para acá no llegan a los anaqueles de los supermercados, y si llegan traen consigo unos precios que los hacen imposible de comprar, la encuestadora Datanálisis, reveló  un estudio sobre la escasez, manifestando que hay ocho alimentos básicos que evidenciaron escasez, casi absoluta, casi de 80%. Estos alimentos son: aceite de maíz, azúcar refinada, harina precocida de maíz, mayonesa, mantequilla y atún enlatado.

   Empresas Polar  es la principal empresa del país que produce estos rubros básicos (Mazeite, Harina Pan, Mavesa, Atún California, etc.) son el máximo monopolio de infraestructura transnacional. Ahora bien, dando una mirada a la realidad del país y ver como en tan poco tiempo prácticamente estos productos se han desaparecido. Entonces, no es de extrañar que tales acciones sean propias de una guerra económica. Sin dejar de lado el papel del estado que no ha sido para nada bueno, falta de políticas que en la práctica den resultados favorables e incrementen la producción de todos estos productos que hoy escasean  en el país, ya que con andar buscando culpables no se solucionan los problemas, menos si no se empieza por aceptar la responsabilidad del estado ante el incremento de dicha realidad. 

  Es que basta  con ver como las panaderías han ejecutado un plan, que consiste en sacar pan salado, dos o tres veces al día cuando por lo general algunos tienen suficiente harina para producir más panes y así ayudar a los venezolanos ante la escasez de productos de la cesta básica,  entre ellos canilla, campesino y gallego panes que por lo general son los que hoy son la mejor opción para los venezolanos para completar las comidas, donde el precio es el mejor indicador para que estos sean los más buscados, y el producto de las colas tan largas en panaderías.

 Aunque hay muchas formas de guerra económica, esa de parar la producción de productos de la cesta básica y producir pocos y llevarlos a los anaqueles a precios dolarizados representa un golpe duro al bolsillo del venezolano, lo que ocasiona que este se sienta desmotivado y vea en el gobierno el único responsable de todas sus penurias. Sin duda alguna, en la actualidad esta estrategia está dando sus resultados.

 También hay que anexar a esta problemática de escasez la corrupción y a práctica “bachaqueo”  que a la larga hace que todo se complique más. Siendo esto un indicador de que no solo es la guerra económica ¡no! hay otras formas de guerra que se asemejan mucho a la anterior y dejan como consecuencia muchos problemas sociales.

 En relación a los productos farmacéuticos y  su notable falta en las farmacias del país, hay mucho más que saber de  todo esto. Por ejemplo ¿quiénes son las empresas encargadas de producir, distribuir tales productos? Otra interrogante que seguro ya muchos venezolanos se ha hecho ¿por qué ahora están escaseando los medicamentos? Preguntas como estas ahora deben ser parte del día del venezolano que se permite cuestionarse acerca de las cosas que suceden en el país.

  Cada vez se puede ver con estupor los anaqueles de las farmacias del país vacías, medicamentos que pueden tardar de uno a 5 meses sin llegar. Estas son parte de la realidad y ocultarlo sería una forma de mostrar indiferencia ante tan progresiva problemática.

  Declaraciones que tienen mucha relación con lo expresado por el exministro de salud, Henry Ventura, quien responsabilizó a la empresas transnacionales de farmacéuticos de la carencia de medicamentos: Venezuela padece la desaparición de los medicamentos porque ocho trasnacionales que hacen vida comercial en el país han decidido que los pacientes no tengan medicamentos les han bloqueado su entrada a la nación”. Cada vez esta situación se hace más notoria,  originar la escasez de medicamentos es otra de las estrategias de estas empresas para colapsar más al país.  Y así ser partícipe de toda esta triste realidad que hoy viven los venezolanos.

 Sin embargo, otra parte de esta carencia de insumos es la consecuencia de la baja inversión en sector farmacéutico, Cifras publicadas en la  memoria y  cuenta del Ministerio de Salud, en el 2015 se aplicaron 20.869.247 vacunas, beneficiando a 10.269.440 personas, con una inversión total de Bs 467.375.510. Presenta un descenso con la de 2014, cuando se aplicaron 21.567.492 dosis que beneficiaron 8.897.972 personas, por menos dinero: Bs 425.123.870. (Memoria y Cuenta Ministerio de Salud 2015). Lo que supone que hay una falla en los programas de prevención, inversión y abastecimiento de medicamentos.

 ¿Un constante boicot económico  o  fallas del sistema?

 Hoy algunos datos de la historia venezolana demuestran la relación de muchas transnacionales con empresas en Venezuela que se incorporan al boicot económico, como parte de una guerra económica suscitada desde los gobiernos foráneos.  Situación que para muchos no debe ser un secreto, ya que la historia puede refrescar la memoria a quien se da por olvidado o simplemente es indiferente a las carencias de los venezolanos y, dan por sentado que está difícil situación es culpa única y exclusivamente de gobierno de Maduro, descartando así toda las constantes intervenciones de países ambiciosos que no les conviene que en Venezuela todavía se mantenga en pie el ideal del actual gobierno y su   modelo económico. Al final los que padecen la cruda realidad somos los venezolanos, llámense oficialistas u opositores.

 La inflación abrumadora, más corrupción, unida a la escasez y ajuste de precios, incrementan  el descontento, no es para menos .Tan poco por eso hay que caer en la   confusión de que todo estas infinidades de carencias son productos de las fallas de un sistema, puede ser que sí la mayoría de las cosas sean producto de malas políticas implementadas, pero también hay manos operando para poner a los venezolanos en aprietos y así contribuir al desespero de todos. Desde ese conocimiento se desprende el constante llamado a referéndum revocatorio,  ya que este se hace mejor en un  ambiente de carencia social. Que quizá lo amerite, siendo así todas estas situaciones serías ecos de un cambio oportuno de gobierno.

 Ya para culminar, es necesario saber que todos estos fenómenos sociales se están evidenciando en Venezuela, de allí es que se desprende una realidad que no es para nada alentadora, todo lo contrario.

  Por tal razón, entender que aquí en Venezuela hay crisis del sistema, corrupción y una constante guerra económica es fundamental, ya que escondiendo una mentira tan obvia no se ayuda a nada, todo lo contrario se contribuye al deterioro del país. Estas acciones hoy están desangrando a Venezuela. Y callar frente a tales actos que son tan obvios sería ser indiferente. Pero como aquí se habla claro, sin guardar y cuidar los intereses de nadie en específico, se pueden decir tales verdades, como por ejemplo, que hoy para el presidente Nicolás Maduro y todo su gabinete la improvisación se ha parte de las acciones para la conducción del país es cierto, como también que la mayor parte de la responsabilidad de la cruda realidad que atraviesa Venezuela sea las consecuencias de las fallas en las políticas implementadas es otra verdad. Sin embargo, teniendo en cuenta que la oposición venezolana tampoco ha hecho nada para ayudar a salir de la crisis, sino todo lo contrario a contribuido a emanar más problemas que hoy son evidente y, que demuestran  que ellos lo que ansían es el poder, ya que lo que hacen es puro hablar y engañar al pueblo con sus discursos rayados. Y por último la corrupción, desde el “bachaqueo” y la ambición de muchos políticos tanto del oficialismo como la oposición que lo que han hecho es llenarse sus bolsillos, arruinando a Venezuela y dejándola a frente a infinidades de problemas.

 Esas son verdades que hoy perecer ser objeto de conveniencia mantener escondidas, y que mejor forma que hacerlo echándole la culpa al otro.