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lunes, 22 de mayo de 2017

Carta abierta a los estudiantes que estén desanimados como yo.


Archivo: psicologíaaldia.com

Carta abierta a los  estudiantes que estén desanimados  como yo.  (1ra parte)

Estoy harto de muchos aspectos de nuestra realidad social, cultural, educativa y política. Por ejemplo, estoy cansado: 

· ­De tratar de entender el porqué de tantos insultos de los altos “líderes políticos”, tanto del chavismo como de la oposición.

· De un contexto que muestra cada día un camino lleno de enfrentamientos, divisiones y sobre todo de intolerancia.

· De que los adultos y grandes líderes que llevan un buen tiempo en la palestra de la política nacional no nos den un buen ejemplo y, sean capaz de trabajar para llegar al diálogo, ese que mucho de los venezolanos soñamos.

· De los medios de comunicación nacionales y privados, los cuales no hacen otra cosa que mantenerse bajo la enmarcada línea de servir a los intereses de quien los adiestra y provee.

· De que las aulas de clases sean tomadas para politizar y no para enseñar.

· De los fanáticos políticos partidistas. Casi la gran mayoría de los altos líderes políticos de mi país, Venezuela.

· De que la mediocridad y el conformismo nos estén ganando la partida.

· De que hayamos dejado de lado las críticas, autocríticas y las ganas de elevar nuestras voces para hacer entender que no estamos de acuerdo con muchas acciones que atentan con nuestra seguridad.

· De que a estas alturas no hemos sido capaces de cerrar filas a esos políticos que ya tienen toda una vida en un alto cargo como dirigente político, para así dar paso a la nueva generación.

· De que la corrupción hoy parezca ser el camino de los inteligentes.

· De las cadenas del Presidente Nicolás Maduro para drenar toda su arrechera, bajo insultos, gestos y hasta mención de la madre de otro político opositor a su gobierno.

· También de los líderes opositores, los cuales hacen lo mismo.

· De las instituciones que no trabajan bajo la eficiencia, todo lo contrario la improductividad es evidente.

· De que la justicia no sea sana y sobre todo justa para la mayoría.

· De que una persona pierda la vida por un teléfono.

· De que en nuestras universidades un paro sea parte de la cotidianidad.

· De otras cosas más que hacen de nuestra vida un camino difícil, donde pensar en irse del país es tan común. 



Carta abierta a los estudiantes que estén desanimados como yo. (2da parte)


¿Pero qué es lo que debemos hacer?


Quiero comenzar esta parte de mi carta con una frase, que para mí es una de las más oportunas para estos tiempos tan difíciles que atraviesa nuestra nación. 


“No te preguntes qué puede hacer tu país por ti, pregúntate que puedes hacer tú por tu país”. John Fitzgerald Kennedy. Estas palabras debió escribirlas popularmente JFK, conocido así por sus amigos. Él seguro veía venir tantas problemáticas y contrariedades en el mundo. 


 Estudiantes, hoy somos la garantía de un mejor mañana. Sí, aunque esto nos pueda ocasionar un poco de angustia, ya que al ver lo desplomado que se encuentra la coyuntura nacional de nuestro país el panorama u horizonte no parece brillar. Bueno, no todo es malo, hoy puedo decirles que tenemos la oportunidad de cambiar ese panorama, sí tenemos la fuerza de enfrentar bajo el trabajo, la correspondencia y sobre todo el compromiso de tener las ganas de trabajar por un país mejor, donde las divisiones que hayan sean sólo para unir más a Venezuela y a todos los venezolanos. Es decir, que hoy tenemos los colores en nuestras manos para pintar ese panorama que parece estar gris y un poco desorientado. Aquí está, tú lo tienes, seguro que sí, son esos colores que nadie gamas podrá robar y sabes por qué, porque el conocimiento es lo único que te pertenece.

Carta abierta a los  estudiantes que estén desanimados como yo.  (3ra parte)


¡Creamos en lo posible!





 Ni hoy, ni mañana, ni pasado es tiempo para que nos gane la angustia, el desanimo y mucho menos para que el miedo se aloje en nuestro interior y pensamientos entorpeciendo nuestras acciones ¡no! hoy más que nunca tenemos que mantenernos con las ganas de hacer las cosas con pasión, entrega y dedicación por nuestro país, nuestro futuro y el futuro de nuestros hijos. De todo lo que hagamos hoy por nuestro país dependerá el futuro de toda la generación de relevo a la nuestra. 



 No es fácil tener ganas cuando hemos visto en otros estudiantes, amigos y hasta compañeros de clase que lo más oportuno ha sido el partir a otro país, eso creo que no ha desanimando más. Sin embargo, hoy insisto que tenemos un mayor compromiso con Venezuela todos los que seguimos apostando en el país, tenemos que trabajar para que nuestra nación se ha el mejor destino para los venezolanos y que todos los que han partido a otros países vuelvan a su país, sí porque les aseguro que por más cómodo que se encuentren los que han decidido irse, hoy quieren volver a su país pero la situación tan crítica es el mayor impedimento.


Humildemente,
Neptalí Colina

Caracas, 22 de mayo del 2017




2 comentarios:

  1. Dios nos da grandes lecciones, para que aprendamos a amar a nuestro país maravilloso rico en todo,que aprovechemos la crisis para crear nuevas oportunidades, para que cuidemos lo que aún tenemos y alimentemos nuestro espíritu que es lo único auténtico que permanecerá por siempre, el estudio, el trabajo y la acción son los únicos mecanismos que nos llevarán hasta donde queramos llegar.

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    1. Tiene toda la razón Sra. Marisol, todas las situaciones difíciles nos hacen crecer como seres humanos, también nos nutren de coraje para hacer frente a las adversidades. La idea es seguir batallando y creyendo en Venezuela y en los venezolanos. Saludos!

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